EL DEMIURGO GNOSTICO
El demiurgo gnóstico
Un boceto de un antiguo amuleto
greco-egipcio que representa a una criatura similar en apariencia a Yaldabaoth.
El demiurgo (del
griego demiurgos , [1] “artesano” [2] ) es el ser
que creó el mundo en el gnosticismo. Los gnósticos lo identificaron con el
dios del Antiguo Testamento. Las escrituras gnósticas lo retratan como
ignorante, malicioso y absolutamente inferior al verdadero Dios que envió
a Cristo a la tierra
para salvar a la humanidad del mundo malvado del demiurgo.
El demiurgo recibe
muchos nombres en las escrituras gnósticas, pero los tres más comunes son
Yaldabaoth (también escrito "Ialdabaoth"), Samael y
Saklas. "Saklas" proviene de la palabra aramea para
"tonto", y "Samael" es arameo para "Dios ciego" o
"Dios de los ciegos". [3] El significado de “Yaldabaoth” es
incierto. El texto gnóstico Sobre el origen del mundo lo
traduce fantasiosamente como "Juventud, muévete para allá", pero
ninguna palabra o cadena de palabras que suene como "Yaldabaoth"
significaba eso en ningún idioma mediterráneo antiguo. [4] “Yaldabaoth”
se parece un poco a “hijo del caos” en arameo, pero aún así es una
exageración, [5] como lo es la
sugerencia intuitivamente plausible de que podría ser una forma condensada de
“Yahvé, Señor de los sábados”. [6]
En el mito gnóstico de la
creación ,
el Cielo, que los gnósticos llamaban el “ Pleroma ”, la “Plenitud”, era
todo lo que existía hasta que una entidad divina llamada Sofía trató de concebir por sí misma,
sin la participación de su pareja celestial ni el consentimiento de Dios.
. Sophia dio a luz a un hijo que fue producto del deseo rebelde y profano
que había surgido dentro de ella.
Este hijo suyo era
el demiurgo. El texto gnóstico Realidad de los Gobernantes describe a
“él” como un ser andrógino, una “bestia arrogante” que se parecía a un feto
abortado tanto en apariencia como en carácter. [7] El Libro secreto de Juan añade que
tenía cuerpo de serpiente y cabeza de león, con ojos como relámpagos. [8] (En la
filosofía griega antigua, el león era con frecuencia un símbolo de pasiones
irracionales. Los gnósticos estaban inmersos en la tradición filosófica griega,
por lo que su descripción del demiurgo con cabeza de león probablemente
pretendía mostrar que era un ser que no podía o no quería controlar sus
impulsos básicos. [9] Eso ciertamente encaja con la
personalidad del demiurgo como se describe en sus textos).
Cuando Sophia vio
el ser horrible y retorcido que había salido de ella, se sintió profundamente
avergonzada y asustada. Ella lo repudió y lo expulsó del cielo.
Desde su posición
solitaria donde su locura y vanidad podían pasar desapercibidas, el demiurgo
dio a luz a los arcontes ("gobernantes" [10] ), seres que
eran como él y podían ayudarlo a administrar el mundo material. Luego creó
el mundo material que, como todas las creaciones, era un reflejo de la
personalidad de su creador.
El demiurgo luego
creó a Adán y Eva y aprisionó en ellos chispas divinas del Cielo. Les dijo
que él era el único dios y emitió los Diez Mandamientos, a pesar de que él
mismo rompió todos y cada uno de esos mandamientos. Por ejemplo, mintió
cuando afirmó ser el único dios y que Adán y Eva morirían si comían del fruto
del Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal; insultó a su madre ya su
padre al negarse a reconocer su existencia; hizo una imagen tallada de lo
divino cuando modeló el mundo material sobre su malentendido corrupto e ignorante
del Cielo; y cometió adulterio al intentar violar a Eva. [11]
De
dónde surgió la idea del demiurgo gnóstico
¿Cómo es posible
que los gnósticos hayan llegado a la idea de que tal ser creó la
tierra? Parece bastante incongruente con el cristianismo tal como lo
entendemos hoy. Pero en la época en que surgió el gnosticismo ( finales del siglo I
o principios del siglo II dC ), ese no era realmente el
caso. Sin duda, los judíos, los paganos romanos y los hermanos cristianos
de los gnósticos encontraron que la idea gnóstica de un creador malvado era
impactante y blasfema. Pero cuando consideramos el entorno intelectual y
espiritual dentro del cual surgió el gnosticismo, dominado por la larga sombra
de Platón, y donde los cristianos todavía estaban tratando de decidir sobre los
fundamentos de su nueva religión y separarla del judaísmo, la concepción
gnóstica del demiurgo tiene mucho más sentido.
La palabra
“demiurgo” proviene de Platón, aunque el demiurgo de Platón estaba lejos de ser
malvado. Para Platón y otros filósofos paganos griegos y romanos que lo
siguieron, el mundo material fue la creación de un "artesano" divino
que hizo del mundo el mejor reflejo del mundo espiritual perfecto de las Formas
que era posible dadas las limitaciones de la materia. [12]
En el judaísmo, era
una tradición establecida separar las facultades particulares de Dios de Dios
mismo y dar crédito a esos seres divinos menores, como la Sabiduría, por haber
ayudado a Dios en la creación del mundo, como en el capítulo octavo de
Proverbios y los veinte. -cuarto capítulo del Eclesiástico. Los cristianos
heredaron y extendieron esta tradición, como cuando el primer capítulo del
Evangelio de Juan identifica a Cristo con la Palabra de Dios/ Logos y
le otorga un papel indispensable en la creación. [13]
Así que la
atribución de los gnósticos del acto de la creación a alguien que no sea el
Dios supremo no era radical para los estándares del cristianismo y el judaísmo
de su tiempo; de hecho, era francamente convencional. Pero todas las
influencias de los gnósticos retrataron a estos ayudantes divinos como
benévolos y su trabajo en armonía con los deseos del Dios supremo perfectamente
bueno. ¿Cómo llegaron los gnósticos a la idea de que el demiurgo era en
cambio malévolo ?
Por extraño que
parezca al principio, esto también fue probablemente una interpretación de
buena fe de las escrituras cristianas que ya estaban muy extendidas, eran
populares y tenían autoridad en la época de los gnósticos. Después de
todo, el Evangelio de Lucas (4:6) y el Evangelio de Mateo (4:8) asumen que
Satanás es el gobernante del mundo cuando Satanás ofrece a Jesús el mundo a
cambio de su adoración. Asimismo, el Evangelio de Juan menciona a un
malvado “príncipe ( arconte ) de este mundo” en no menos de
tres lugares (12:31, 14:30 y 16:11). Lucas (10:18) y Juan (12:31) hablan
de Satanás o de una entidad parecida a Satanás que gobierna la tierra desde el
cielo y que es vencida por el ministerio de Jesús. [14] 1 Juan 5:19
es aún más contundente: “Sabemos que somos hijos de Dios, y que el mundo entero
está bajo el poder del maligno”. [15]
A los cristianos
del primer y segundo siglo, incluidos los gnósticos, se les encomendó el
monumental proyecto de averiguar qué hacer con el “Antiguo Testamento” que
estaban suplantando con su propio “Nuevo Testamento”. En palabras de
Simone Pétrement, estaban intentando “limitar el valor del Antiguo Testamento
dentro de una religión que, sin embargo, lo conserva ”. [dieciséis]
Los primeros
cristianos fueron muy críticos con muchos de los detalles del judaísmo,
afirmando que Cristo había venido a corregir lo que los judíos habían hecho
mal. Considere los comentarios del apóstol Pablo a Pedro sobre la Ley
Mosaica, la pieza central del judaísmo, en Gálatas 2:11-21:
Nosotros mismos somos judíos por
nacimiento y no gentiles pecadores; sin embargo, sabemos que el hombre no
es justificado por las obras de la ley, sino por la fe en Jesucristo. ...
He sido crucificado con Cristo; y ya no soy yo quien vive, sino que es
Cristo quien vive en mí. Y la vida que ahora vivo en la carne, la vivo en
la fe del Hijo de Dios, que me amó y se entregó a sí mismo por mí. no
anulo la gracia de Dios; porque si la justificación viene por la ley,
entonces Cristo murió por nada. [17]
Los gnósticos
tomaron todas estas piezas y las combinaron. Si el mundo había sido creado
por un ser menor en lugar del Dios supremo, y si el mundo estaba actualmente
gobernado por un ser demoníaco, y si Cristo había venido a corregir
las fallas del judaísmo, ¿por qué no postular que el dios creador judío era
el ser demoníaco que gobernó el mundo, que Cristo vino como un emisario del
Dios supremo para salvar a la humanidad del creador ?
Nótese, por cierto,
que los gnósticos podían llegar a esta posición incluso manteniendo la santidad
de las escrituras judías: todo lo que decían esos libros era exacto, pero sus
autores habían ignorado el verdadero significado de lo que habían
escrito. [18]
Tal punto de vista
también tuvo el efecto de permitir a los gnósticos dar sentido a varios pasajes
del Antiguo Testamento que durante mucho tiempo habían preocupado a los
cristianos e incluso a los judíos. “El dios del Génesis”, señala David
Brake,
camina en un jardín terrenal y debe
preguntar dónde está Adán (Génesis 3:8-9); concluye que su creación de la
humanidad y los animales fue un error y decide destruir a todas las personas,
excepto una sola familia y algunas bestias (6:5-22); y luego aniquila
ciudades enteras haciendo llover sobre ellas azufre y fuego (19:24-25). [19]
Los gnósticos
tomaron la palabra del Génesis y concluyeron que este dios era simplemente
malicioso, irascible, estúpido e inepto.
Referencias:
[1] Markschies, Christoph. 2003. Gnosis:
una introducción . Traducido por John Bowden. T & T
Clark. pags. 17
[2] Brakeke,
David. 2010. Los gnósticos: mito, ritual y diversidad en el
cristianismo primitivo . Prensa de la Universidad de
Harvard. pags. 59.
[3] Lewis, Nicola
Denzey. 2013. Introducción al “gnosticismo:” voces antiguas,
mundos cristianos . Prensa de la Universidad de
Oxford. pags. 137.
[4] Ibíd.
[5] Ibíd.
[6] Ehrmann,
Bart. 2003. Cristianismos perdidos: las batallas por las
Escrituras y las religiones que nunca conocimos . Prensa de la
Universidad de Oxford. pags. 123.
[7] Meyer,
Marvin. 2008. “La naturaleza de los gobernantes”. En Las
Escrituras de Nag Hammadi . Editado por Marvin
Meyer. HarperOne. pags. 196.
[8] Turner, John
D. y Marvin Meyer. 2008. "El libro secreto de
Juan". En Las Escrituras de Nag Hammadi . Editado
por Marvin Meyer. HarperOne. pags. 115.
[9] Lewis, Nicola
Denzey. 2013. Introducción al “gnosticismo:” voces antiguas,
mundos cristianos . Prensa de la Universidad de
Oxford. pags. 137.
[10] Ibíd. pags. 135.
[11] Ibíd. pags. 138.
[12] Brakeke,
David. 2010. Los gnósticos: mito, ritual y diversidad en el
cristianismo primitivo . Prensa de la Universidad de
Harvard. pags. 59-61.
[13] Ibíd.
[14] Petrement,
Simone. 1990. Un Dios Separado: Los Orígenes y Enseñanzas del
Gnosticismo . Traducido por Carol Harrison. Harper San
Francisco. pags. 53.
[15] 1 Juan 5:19,
NVI. https://www.biblegateway.com/passage/?search=1+john+5%3A19&version=NRSV
Consultado el 18-3-2018.
[16] Petrement,
Simone. 1990. Un Dios Separado: Los Orígenes y Enseñanzas del
Gnosticismo . Traducido por Carol Harrison. Harper San
Francisco. pags. 46.
[17] Gálatas
2:11-21,
NVI. https://www.biblegateway.com/passage/?search=galatians+2%3A11-21&version=NRSV
Consultado el 18-3-2019.
[18] Brakeke,
David. 2010. Los gnósticos: mito, ritual y diversidad en el
cristianismo primitivo . Prensa de la Universidad de
Harvard. pags. 64.
[19] Ibíd
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